¿En qué se gasta más?

  • Servicios Personales (sueldos y prestaciones) absorben 37 % del gasto total.

  • Servicios Generales (mantenimiento, servicios básicos, arrendamientos) aportan otro 24 %.

  • La Inversión Pública (obras) representa 16 %, signo de trabajos en calles, agua y espacios públicos.

  • Subsidios y apoyos sociales, 11 % del presupuesto.

  • Deuda Pública apenas 4.5 %, lo que indica una carga manejable.

De cada $100 que usa el Ayuntamiento, $37 son sueldos, $24 operación y mantenimiento, $16 obras, $11 apoyos sociales y $5 pago de deudas.

¿Cuánto nos toca a cada quién?

Con base en los 76 829 habitantes (Censo 2020)

  • $1 438 por persona se van a salarios de empleados municipales.

  • $923 a mantener y operar servicios (alumbrado, recolección, etc.).

  • $611 a inversión en obras y proyectos.

  • $420 a becas, apoyos y programas sociales.

  • $340 para comprar materiales y gasolina.

  • $175 para cubrir adeudos.

Imagina tu aportación anual: poco más de $3 900. La tercera parte se destina a la nómina y otra tercera parte a operar y mejorar la ciudad.

¿Se gastó lo planeado?

Con base en los 76 829 habitantes (Censo 2020)

  • Rubros como Materiales y Servicios Generales rondan el 100 %, lo deseable.

  • Servicios Personales quedó en 96 %: se ahorró 4 %, por vacantes o salarios no ejercidos.

  • Transferencias y Subsidios superó lo autorizado (149 %), reflejando ampliaciones para apoyos sociales.

  • Deuda Pública se quedó en 76 %, porque se reprogramó parte del pago pendiente.

En general, el gasto siguió lo planeado. Se reforzaron programas sociales y se postergó parte del pago de deudas para liberar recursos.

¿Cuándo se gasta más?

  • Enero-marzo (Q1): se ejerció $76 M para servicios básicos y nómina.

  • Abril-junio (Q2) añade $82 M; arranca la temporada fuerte de obra y mantenimiento.

  • Julio-septiembre (Q3) baja el ritmo a $60 M por lluvias e inicio de licitaciones.

  • Octubre-diciembre (Q4) repunta con $82 M para concluir obras y cerrar ejercicio.

Como ocurre cada año, el gasto sube en el segundo y último trimestre para aprovechar clima y tiempos de cierre.

Indicadores “rápidos” de salud financiera

Conclusión

¿Hay dinero a la mano?

  • $12.4 millones, el efectivo y otros activos de corto plazo no alcanzan para cubrir las cuentas que vencen este año.

  • Por cada $1 que se debe, ¿cuánto hay para pagarlo?, 0.62 a 1. Es decir; solo hay $0.62 para cada peso comprometido en 2024. El ideal es 1.5 a 1.

  • Sin inventarios.- 0.56 a 1. Es decir; el resultado empeora si quitamos materiales y almacenes.

  • La caja municipal está justa; cada peso que hay que pagar se cubre solo con 62 centavos de activos rápidos y apenas con 32 centavos de efectivo puro. Urge vigilar los pagos semanales y acelerar los cobros.

¿Estamos muy endeudados?

  • 56.6 %, Un poco más de la mitad de todo lo que posee el municipio está financiado con deuda.

  • El 43 % de los bienes se cubre con recursos propios; el resto depende de terceros.

  • el nivel de deuda es moderado-alto—no crítico, pero limita la posibilidad de pedir más préstamos en 2025 sin plan de amortización claro.

Resistencia ante imprevistos

  • Sólo 20 días se pueden operar sin nuevos ingresos. Lo recomendable es tener al menos 30-90 días. Actualmente el “tanque” alcanza para tres semanas de nómina y servicios si, por ejemplo, se retrasara una participación estatal.

  • La recaudación es ágil; el dinero que se factura entra rápido. Eso ayuda a compensar la falta de efectivo, pero hay que mantener el ritmo.

¿Por qué debería importarte?

  • Servicios al día: si el Ayuntamiento no tiene liquidez, pueden atrasarse pagos a recolectores de basura, alumbrado o becas.

  • Obra pública: con endeudamiento alto y caja corta, iniciar nuevas obras sin financiamiento asegurado puede poner en riesgo proyectos en curso.

  • Impuestos locales: mantener una rotación de cobros sana evita incrementos abruptos en predial o derechos, pues la tesorería no depende de deuda cara.

En resumen, 2024 cerró con tensión de liquidez a corto plazo pero una cartera cobrable muy dinámica; la prioridad es equilibrar pasivos corrientes y constituir reservas para contingencias sin elevar el endeudamiento.